Guía identificación peligros ergonómicos

El objetivo de esta guía no es otro que facilitar a los delegados y delegadas de prevención de riesgos una herramienta ágil y práctica para la identificación de los peligros ergonómicos a los que están expuestos los trabajadores del centro de trabajo. Todo aportando los argumentos necesarios para la exigencia de la realización de las evaluaciones específicas a la empresa que procedan.

La ergonomía sigue siendo hoy en día, después de la aprobación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales en 1995, una de las áreas de la prevención de riesgos laborales que menos se ha desarrollado en las empresas.

La consecuencia de este déficit es que la salud de los trabajadores se ve gravemente afectada, por ser la ergonomía, una disciplina que incide directamente sobre las condiciones de trabajo y la salud de los trabajadores y trabajadoras, como lo demuestran los datos estadísticos.

Si analizamos los datos de siniestralidad registradas a nivel de España, podemos observar que durante la última década se han incrementado cerca de un 9% los accidentes que se consideran como consecuencia de un sobreesfuerzo; la mayoría de ellos debido a la manipulación manual de cargas. Por otra parte, las enfermedades profesionales debidas a posturas forzadas y movimientos repetitivos, son ya la primera causa de incapacidad en nuestro país.

Todo parece indicar que gran parte de este daños a la salud de los trabajadores y trabajadoras son derivados de la exposición de estos altos niveles de riesgo debidos a condiciones físicas exigentes en sus puesto de trabajo.

Estas condiciones de trabajo inadecuadas que presentan peligros ergonómicos, que rayan la precariedad, sólo se pueden detectar mediante evaluaciones específicas de los puestos de trabajo de los diferentes tipos de riesgos ergonómicos.

Cuestión que, como demuestran los datos de siniestralidad, muchas empresas no están haciendo estas evaluaciones ergonómicas o si las realizan son sustancialmente mejorables.

La identificación de estos peligros es, sin lugar a dudas, el primer paso de actuación. Posteriormente, la evaluación de los riesgos detectados debe llevarnos a actuar sobre los mismos de tal manera que si no es posible su eliminación inmediata, se deben medir y constatar cuál es la repercusión de estos peligros a la salud de los trabajadores y trabajadoras para protegerlos, tal y como establece la Ley de prevención.

Esta guía quiere incentivar y motivar la implicación del delegado/a de prevención a la hora de velar por el cumplimiento de la normativa vigente, tal y como les encomienda la Ley de prevención de riesgos laborales y dotarlos de los argumentos técnicos adecuados para que adquieran los conocimientos necesarios para velar por unos puestos de trabajo más seguros y saludables.